El Espíritu
Santo:
Regenera
Juan 3.5 Respondió
Jesús: De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere de agua y del
Espíritu, no puede entrar en el reino de Dios.
Tito 3.5 Nos salvó, no por obras de justicia que
nosotros hubiéramos hecho, sino por su misericordia, por el lavamiento de la
regeneración y por la renovación en el Espíritu Santo.
Vida
eterna impartida por la regeneración
El concepto central
de la regeneración es que un creyente el cual en un principio estaba muerto
espiritualmente ahora ha recibido vida eterna.
Vemos la idea de
nacer de nuevo, o la figura de renacer. En la conversación de Cristo con
Nicodemo Él dijo: «Os es necesario nacer de nuevo.» Aparece en contraste con el
nacimiento humano en Juan 1:13./ Los cuales no son engendrados de sangre, ni
de voluntad de carne, ni de voluntad de varón, sino de Dios. / En una segunda figura, la de la resurrección espiritual, se
declara a un creyente en Cristo como «vivo
de entre los muertos» (Ro. 6:13). Ni tampoco presentéis
vuestros miembros al pecado como instrumentos de iniquidad, sino presentaos
vosotros mismos a Dios como vivos de entre los muertos, y vuestros miembros a Dios
como instrumentos de justicia.
En Efesios 2:5/ Aun
estando nosotros muertos en pecados, nos dió vida juntamente con Cristo (por
gracia sois salvos),/ o sea, se
declara que Dios, «aun estando nosotros muertos en pecados, nos dió vida
juntamente con Cristo», literalmente «nos hizo vivos junto con Cristo».
En esta conversación también hay una tercera figura, la de la nueva creación,: El creyente es exhortado:
«y vestíos del nuevo hombre, creado según Dios en la justicia y santidad de la
verdad» como vemos en (Ef. 4:24).
En 2 Corintios
5:17 el pensamiento se hace claro: «De modo que si alguno está en Cristo, nueva
criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas.»
la nueva vida, se recibe por fe en Cristo.
Dada la naturaleza
del acto del nuevo nacimiento, la resurrección espiritual y la creación, está
claro que la regeneración no es
llevada a cabo por ninguna buena obra del hombre. No es un acto de la voluntad humana en sí misma, y no es producida por
ninguna ordenanza de la iglesia tal como el bautismo por agua. Es enteramente
un acto sobrenatural de Dios en respuesta a la fe del hombre.
La
regeneración es instantánea y es inseparable de la salvación.
Una persona salva tendrá una experiencia espiritual subsiguiente, pero la experiencia es la evidencia de la
regeneración, no la regeneración misma. En un sentido, es posible decir que
experimentamos el nuevo nacimiento, pero lo que queremos significar con esto es
que experimentamos los resultados del
nuevo nacimiento.
No hay comentarios:
Publicar un comentario